Cómo el movimiento afecta tu intestino

Cómo el movimiento afecta tu intestino

En los últimos años, el microbioma intestinal ha ganado protagonismo en el mundo de la salud, y con razón. Un intestino saludable no solo mejora la digestión, sino que también refuerza el sistema inmunológico y puede ayudar a prevenir enfermedades como las cardiopatías y los trastornos autoinmunes. Más allá de los suplementos y decisiones saludables de alimentación, hay un paso igual de importante que quizás no estés considerando: el ejercicio.

La Dra. Christine Lee, gastroenteróloga, nos explica cómo el ejercicio impacta de manera significativa en la salud intestinal y qué tipos de actividad física pueden ayudar a mantener un intestino feliz.

“El ejercicio es una de las formas más poderosas de potenciar tu microbioma intestinal”, afirma la Dra. Lee. “Es probablemente la mejor ‘medicina’ que tenemos para tu intestino”.

El ejercicio mejora la salud intestinal de varias maneras:

  1. Mejora la Motilidad Intestinal
    Tu tracto digestivo tiene su propio ritmo natural, que mantiene las cosas en movimiento de manera eficiente. Cuando este ritmo es demasiado rápido, podrías encontrarte corriendo al baño con frecuencia; si es demasiado lento, puedes experimentar hinchazón, gases, dolor y náuseas. El ejercicio regular permite que tu intestino encuentre su ritmo perfecto.
  2. Aumenta la Circulación
    Durante el ejercicio, tu corazón bombea con más fuerza para llevar sangre y oxígeno adicionales a los músculos. Parte de esa circulación también llega directamente a tu intestino, lo que fortalece su capacidad para mantener un equilibrio saludable de bacterias.
  3. Tonifica los Músculos Digestivos
    La actividad física no solo mejora el tono muscular en los brazos y el abdomen, sino también en los músculos digestivos. Un intestino en forma utiliza estos músculos tonificados para expulsar los desechos de manera más eficaz, lo que contribuye a una digestión saludable.
  4. Mantiene tu Metabolismo en Forma
    El ejercicio ayuda a mantener un metabolismo saludable, lo cual es crucial para la digestión y el equilibrio intestinal. Un metabolismo lento puede llevar a un crecimiento excesivo de bacterias dañinas y complicaciones.
  5. Te Prepara para Dormir Mejor
    Un buen descanso es vital para la salud intestinal. El ejercicio regular puede mejorar la calidad del sueño, permitiendo que tu cuerpo, incluido el intestino, se repare y regenere durante la noche.

¿Cuál es el Mejor Ejercicio para un Intestino Saludable?

No necesitas seguir un programa extenuante para mejorar tu salud intestinal. La clave es empezar en tu propio nivel y realizar cualquier tipo de ejercicio que disfrutes y que se ajuste a tu rutina diaria.

Actividades como caminar a paso ligero, bailar, o tomar clases de Pilates pueden ser beneficiosas. Lo importante es que tu corazón bombee más rápido de lo normal y que te muevas lo suficiente como para sudar.

Si eres nuevo en el ejercicio, comienza despacio y con supervisión para evitar lesiones. Y si tienes alguna condición cardíaca o pulmonar, consulta con tu médico antes de comenzar cualquier tipo de actividad física.

En resumen, moverte más no solo beneficia a tu cuerpo en general, sino también a tu salud intestinal. En nuestro estudio de Pilates, entendemos la importancia de un enfoque integral para el bienestar. Incorporar el movimiento a tu rutina diaria puede marcar una gran diferencia en cómo te sientes, tanto por dentro como por fuera. Así que, ¿por qué no darle a tu intestino el cuidado que se merece mientras fortaleces y equilibras tu cuerpo con Pilates?

Regresar al blog