Hacer ejercicio es importantísimo para la salud del cuerpo y la mente, pero cuando uno se siente mal, a veces se pregunta si debería detenerse o continuar.
“El ejercicio es medicinal". El Dr. Daniel Montero, médico de medicina del deporte en Mayo Clinic, ofrece consejos al respecto. "Hasta puede ayudarle a sentirse mejor porque, por ejemplo, abre los conductos nasales; pero tal vez desee reducir la intensidad y la duración de la rutina de ejercicios, así como limitar las actividades en grupo”, sugiere.
Dada la necesidad de mantener una distancia social por COVID19, si no te sientes bien, evita ir a sitios cerrados y practica tu rutina de ejercicios al aire libre o desde casa.
Por ejemplo, prueba tomar una clase privada de Pilates virtual y marca tu propio ritmo, junto a una instructora fisioterapeuta de The Pilates Studio. Tu salud bien vale este tiempo dedicado 100% a sentirte mejor.
“El ejercicio, en cualquier cantidad, aporta ventajas”, anota el Dr. Montero.
Para continuar moviéndote en intervalos más cortos de tiempo y bajando la intensidad, te recomendamos nuestras pausas activas. Son rutinas cortas y balanceadas de 8-12 minutos de movimientos funcionales y estiramientos. ¡Pregúntanos si te interesa saber más!
En caso de fiebre, dolor del cuerpo, cansancio u otros síntomas como dolor de estómago o tos áspera, el Dr. Montero recomienda hacer reposo en cama durante unos días hasta que los síntomas disminuyan.
Es importante escuchar a nuestro cuerpo y seguir nuestros instintos. A medida que te recuperes, puedes ir retomando el ejercicio poco a poco.
Habla con tu médico si tienes dudas, sientes dolor o presentas otros síntomas al reanudar la actividad física.