Se conoce como suelo pélvico al conjunto de músculos, estructuras y ligamentos que se fijan a la pelvis. De su posición adecuada depende su normal funcionamiento.
Lo forman las siguientes estructuras óseas: el ilion, sacro, coxis, pubis e isquion. También está conformado por los siguientes órganos pélvicos: en la parte anterior, la vejiga y la uretra, en el medio el útero y la vagina y en la parte posterior el recto y el conducto anal. A pesar de esta división, todas estas estructuras se encuentran fuertemente relacionadas entre sí a través de tejido conectivo.
El suelo pélvico tiene una compleja formación muscular que se comporta como una hamaca que da soporte y suspensión a los órganos abdominopélvicos.
El músculo elevador del ano en conjunto con el músculo coccígeo, forman el llamado diafragma pélvico, siendo el primero el componente principal.
Ahora que ya tienes la teoría, vamos a lo siguiente: ¡prevenir es fundamental!
Pequeñas pérdidas de orina o gases nos avisan que la musculatura se ha resentido, pero en otras ocasiones la lesión no genera ningún síntoma.
Las disfunciones del suelo pélvico son problemas de salud frecuentemente ocultos que deterioran la calidad de vida.
Principales causas de problemas en el suelo pélvico:
- Embarazo: por el peso del útero.
- Parto: al pasar el bebé a través de la vagina.
- Posparto: practicar precozmente ejercicios abdominales, realizar saltos, practicar deportes o llevar pesos.
- Menopausia: por los cambios hormonales que provocan pérdida de flexibilidad, atrofia e hipotonía.
Existen varias técnicas y tratamientos para fortalecer los músculos de esta zona y uno de los más recomendados es la realización de los ejercicios de Kegel, que consisten en la contracción de los músculos del suelo pélvico.
Para identificar correctamente los músculos que debes contraer, la próxima vez que vayas al baño a orinar intenta cortar el chorro de orina voluntariamente. ¿Lo habías escuchado antes, cierto? ¿recuerdas dónde? Probablemente, en tus clases de Pilates en Refomer o Pilates en colchoneta.
El método Pilates es uno de los entrenamientos físicos más completos que podemos encontrar en la actualidad, ya que entre sus objetivos se encuentra mejorar la postura general del cuerpo y equilibrar los músculos que rodean la región lumbo-pélvica. Entre estos músculos se encuentran los abdominales y el suelo pélvico.
La activación correcta del core protege tu suelo pélvico de las situaciones de riesgo.
Evita aguantar la respiración al realizar ejercicios del core, ya que al hacerlo estamos aumentando la presión que el diafragma ejerce sobre la cavidad abdominal hacia abajo, hasta nuestro suelo pélvico.
Como vemos, Pilates es el mejor aliado, pero para aprovechar sus beneficios debemos realizarlo con una correcta supervisión de profesionales especialistas, así que no temas preguntar sobre la capacitación y formación de tu instructor de Pilates.
Por: Lic. Magdalena Ortega
The Pilates Studio Panamá
Ciudad de Panamá